Si estás pensando en hacerte un tratamiento de micropigmentación asegúrate ante todo de elegir un centro que cumpla con todos los requisitos exigidos en la normativa vigente. Piensa que es por tu seguridad.
El material que se usa en estas técnicas va a atravesar tu piel, y por ello debe de ser estéril y de un solo uso. Cerciórate de que es abierto en tu presencia.
Los pigmentos tienen que estar autorizados por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios.
El especialista que aplicará tu tratamiento tiene que acreditar que posee formación higiénico-sanitaria y sus vacunas tienen que estar en regla (tétanos y hepatitis b) y tiene que cumplir con los siguientes pasos en tu tratamiento:
- Ficha de salud, para asegurarse de que el tratamiento no está contraindicado.
- Explicarte el consentimiento informado OBLIGATORIO para realizarte una prueba de sensibilidad a los pigmentos, que tú tendrás que firmar.
- La prueba de alergia se realiza una semana antes del tratamiento, también con material desechable.
- El día de la aplicación, te hará un diseño previo y sólo cuándo lo apruebes, comenzará a transferirlo con los colores y técnicas aprobadas por ti, siempre con material desechable.
- Al final del trabajo, asegúrate de pedir la factura correspondiente, que te será útil en caso de tener que hacer una reclamación.
- La aparatología que se use también es un factor a tener en cuenta. No puede llevar el marcado CE, ya que únicamente se puede adquirir a una empresa española, con la correspondiente autorización sanitaria.
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